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Necrosis avascular de la cabeza femoral

Lunes 8 de junio de 2020

La necrosis avascular de la cabeza femoral, es una enfermedad en la que el hueso de la cabeza femoral sufre necrosis (muerte del tejido óseo) a consecuencia de una aliteración en su irrigación sanguínea.

Esto provoca gran dolor, ya que es justamente la cabeza femoral, la parte redondeada  del fémur, la que se articula con el acetábulo de la pelvis y la que soporta el peso del cuerpo.

Cuando ocurre necrosis en un área extensa de la cabeza femoral, el hueso muerto pierde la capacidad de soportar el peso del cuerpo y colapsa (se hunde) con la consiguiente perdida de la esfericidad de la cabeza femoral.

 

El síntoma principal de la necrosis avascular es el dolor, que se presenta en la región inguinal. Sin embargo, en algunas ocasiones el dolor puede ser leve o no estar presente en las etapas iniciales de la enfermedad.

 

El estudio inicial es una radiografía de pelvis, con ella podemos descartar otras causas de dolor como tumores, artrosis, pinzamiento femoroacetabular, displasia de cadera, etc. Una vez descartadas estas causas , el estudio que corresponde realizar en casos de sospecha de necrosis avascular es una Resonancia Magnética de Pelvis, ya que en ella podremos evaluar ambas caderas.

 

Varios estudios demuestran que, a pesar de que no se tenga dolor en la cadera contraria, esta enfermedad termina afectando a las dos caderas en el 80 % de los casos. Una evaluación temprana de la cadera contralateral permite realizar acciones que disminuyan el riesgo de colapso de la cabeza femoral.

 

La forma en la que se produce esta enfermedad no es del todo comprendida, sin embargo la teoría mas aceptada es una interrupción de la irrigación sanguínea de la cabeza femoral, que la conduce a la necrosis del tejido óseo.

Se han identificado múltiples causas, sin embargo no en toso los casos se logra identificar una causa en particular. Algunas de las causas mas frecuentes identificadas son:

  1. Daño de los vasos que irrigan la cabeza femoral  (ej. fractura del cuello femoral).
  2. Daño de las paredes de los vasos que irrigan la cabeza femoral (e. vasculitis o radioterapia)
  3. Obstrucción de los vasos sanguíneos que irrigan la cabeza femoral con disminución o interrupción del flujo sanguíneo por coágulos. (e. alcohol, corticoides, anemia de células falciformes)

 

En etapas iniciales está indicado el manejo no quirúrgico, esto es, utilizar bastones para disminuir la carga de esa cadera, medicamentos para disminuir el área de necrosis y medicamentos para disminuir el dolor. Sin embargo, pese a todas estas medidas, muchas veces no se logra frenar la progresión de la necrosis.

En esta etapa , algunos pacientes se pueden beneficiar de una cirugía de descompresión de la cabeza femoral. Esta cirugía consiste en realizar a través de una pequeña incisión en la piel, una perforación en la cabeza femoral dirigida al área de necrosis, guiada por rayos X, para descomprimirla y mejorar el flujo sanguíneo.

Esta cirugía logra revertir la necrosis avascular en aproximadamente un 50% de los casos, y en un porcentaje mayor logra disminuir en forma considerable el dolor. En los casos en que no se logra frenar la necrosis, y en los casos en que la necrosis progresa llegando al colapso de la cabeza femoral, el tratamiento consiste en una prótesis total de cadera.